Las zarzuelas de “La Revoltosa” y “La verbena de la Paloma” contribuyen a realzar el “Año Chapí”

Durante el pasado fin de semana, en el Teatro Chapí, se pusieron en escena dos de las zarzuelas más representativas del mal llamado género chico: “La verbena de la paloma” y “La revoltosa” de Tomás Bretón y Ruperto Chapí, respectivamente. Estos actos han sido, sin duda, dos de los momentos más señalados de lo que ha pasado a denominarse en nuestra ciudad “Año Chapí”, con motivo del centenario de la muerte de nuestro paisano, el compositor Ruperto Chapí Lorente.
Las dos sesiones, que tuvieron lugar el viernes 27 de febrero y el sábado 28, llenaron de nuevo el teatro y fueron representadas por la compañía Antología de la Zarzuela y el Orfeón de Voces Crevillentinas, bajo la dirección escénica de Antonio Ramallo, y con la dirección musical de José Antonio Irastorza al frente de la Orquesta Sinfónica del Teatro Chapí. La alcaldesa de la ciudad, Celia LLedó, asistió a la sesión del sábado, en la que estuvo acompañada por el concejal de Turismo –Jesús Martínez–, los alcaldes de Castilla, Onil, Cañada y Campo de Mirra, además de concejales de las localidades de Sax y Beneixama (ante la ausencia de sus alcaldes), mencionando especialmente la visita de la Directora General de Cultura de la Generalitat, Concha Sirvent.

112 años han pasado desde que Chapí estrenó “La Revoltosa” un 25 de noviembre de 1897, y su preludio ha sido catalogado como “Sinfonía de Madrid”, preludio que todos los días escuchamos desde el campanario de la Iglesia Arcedianal de Santiago y que gracias a Chapí nos sirve de nexo de unión a los villeneros.

En el menú preparado por la dirección del Teatro Chapí para este fin de semana destacaba el excelente plato fuerte, “La Revoltosa”, que será recordado en los próximos años gracias a la gran interpretación de la compañía Antología de la Zarzuela y de la inigualable interpretación musical de la Orquesta Sinfónica del Teatro Chapí, que fueron ovacionados durante largos minutos por los espectadores que, como decíamos, llenaron las dos sesiones del fin de semana.